miércoles, 10 de diciembre de 2025

El legado de Jorge Brito en River y el "Riesgo Cemento"

Brito Presidente, las dos caras de su gestión

Se acaba de confirmar que River no jugará la Copa Libertadores 2025 y con este hito se cierra el ciclo de Jorge Brito como Presidente del club. Es hora del balance de su presidencia. 

Cuando asumió Brito, alguien con trato habitual no dejaba de mencionar que en River se cerraba el tiempo de los CEOs en el poder. Empezaba el de un dueño y conllevaría a una impronta en una gestión muy diferente a la de Rodolfo D'Onofrio, quien dejaba un club que recién hacía un mes recibía público.

El mayor legado de Jorge Pablo Brito en el club será, sin dudas, la remodelación del estadio, donde se cobraban abonos que no correspondían con las instalaciones y, mucho menos, con asientos que muchas veces eran simples pedazos de madera donde había que hacer equilibrio.

En ese sentido, D'Onofrio inició la reforma modernizando el campo de juego, aprovechando la ausencia de público por la pandemia. En este cambió, bajó unos metros el campo de juego, lo que permitió que puedan continuarse las tribunas bajas. Además Rodolfo dejó todos los estudios y proyectos preparados para que su sucesor implemente la remodelación. Como dijimos en el balance de sus primeros seis meses, el estadio iba a ser la obsesión del joven presidente y Brito logró su objetivo: transformó al Monumental en un estadio que no tiene nada que envidiar a los del primer mundo y es el candidato ideal a ser sede del Mundial 2030.

En segundo lugar, pero no menos importante para el futuro de la institución, se ubica la obtención y construcción del Predio Cantilo, un espacio vital para las inferiores del club, el verdadero motor de la economía del club. Mientras D'Onofrio pudo transformar el predio de Ezeiza en el "River Camp", Brito hizo lo propio con las inferiores que entrenarán en un sitio de privilegio a nivel Latinoamérica.

Siguiendo con los aspectos institucionales, en su gestión se modernizó el Estatuto del Club, que tenía más de 20 años. Ahí apareció la primer sorpresa, que sería premonitoria. A contramano de las prácticas habituales en el fútbol argentino, Brito impulsó la prohibición de la reelección presidencial. Pero tampoco careció de polémicas, como la extensión de un mandato más para los vocales, frustrando toda aspiración de renovación de la Comisión Directiva.

Para cerrar lo positivo, vale mencionar tres aspectos positivos de su gestión tan importantes como las anteriores. Jorge Brito fue un verdadero multiplicador de ingresos del club. Ya desde su gestión como Vicepresidente al llegar en 2013 pero, sobre todo, con el naming del estadio y negociaciones que llegaban de la mano de su poder fuera del club. Recibió un club con déficit y entregó uno con 200 millones de dólares de facturación y un estadio renovado. "Tener un presidente empresario es una ventaja enorme en lo económico", comenta siempre alguien que camina los pasillos del primer piso desde hace décadas. Y, por si esto no fuese poco, luego de que la pandemia elimine los ingresos de ticketing, Brito recibió un club apenas equilibrado y logró cuatro años consecutivos del mayor superávit de la historia.

Al mismo tiempo, fortaleció dos aspectos no menores. La profesionalización de la gestión, con un Gerente General de su riñón corporativo en el que confió ciegamente el management del club. Y, dato no menor, la aceptación de las críticas periodísticas a su gestión, algo poco común cuando se habla de un presidente.

Como no cualquiera suma sin restar, la cara negativa de la gestión es la gran sombra de su gestión. Al no ser un futbolero de alma, postergó lo más preciado para los hinchas: el fútbol profesional. No lo hizo en términos económicos, ya que la inversión fue fuerte, sino que sucedió por dos motivos. 

En primer lugar, delegó todo en los dirigentes a cargo del fútbol así como en Francescoli, el manager -y empleado del club-. Pero lo más grave del caso fue que esta delegación se transformó en descontrol. Millones de dólares en refuerzos sin control, doble mercado de pases con la llegada de Gallardo, quien se tornó en el CEO del fútbol. La imagen de un club al que le sobraba la plata generó que los equipos y representantes se aprovechaban de River. Basta mencionar que para traer a Barco, le exigieron incorporar también a González Pírez. Y el club aceptó.

Esto se coronó con contratos altísimos que terminaron anulando el hambre de gloria local. Para qué arriesgar el físico que podría frustar una posibilidad de jugar el Mundial o una transferencia en el torneo local contra Riestra, por mencionar un caso, si el torneo otorga 500 mil dólares a repartir entre Cuerpo Técnico y el plantel? Los incentivos terminaron invertidos para muchos jugadores. La liviandad con que se tomaban algunos partidos llamaba la atención. Y el ciclo terminó con la peor racha de local de la historia, perdiendo con Boca y quedándose fuera de la Libertadores. Debacle total.

Y esta debacle futbolística tiene su correlato en lo económico. A la amplia diferencia de premios entre la Libertadores y la Sudamericana se suma que River tendrá muy pocas chances de clasificar por puntos al Mundial de Clubes 2029 que repartirá a cada participante cerca de 20 millones de dólares. El golpe a la economía del club es sideral.

La política interna también se le fue de las manos. Una regla de la política dice que cuando no existe un enemigo suficientemente amenazante, el grupo gobernante tiende a concentrar sus ansias de poder y conflicto hacia el interior. El mandato de Brito fue un reflejo de esta regla. Se distanció de su antecesor y hubo una verdadera guerra fría por su sucesión, entre Stefano Di Carlo y Matías Patanian, saldada en favor del primero mientras el presidente se mostraba prescindente. Esta tensión provocó momentos de bajeza total, como la publicación del celular del Vicepresidente, y terminó impactando en el rendimiento del equipo en el segundo torneo de Martín Demichelis, a quien se lo emparentaba con Patanian para limar sus aspiraciones.

En este repaso, no se puede pasar por alto que la remodelación del Monumental carecía por completo de los colores del club y sólo incorporaron un poco de blanco y rojo por fuertes las críticas. Esta secuencia terminó, incluso, en una manifestación pública del mismo Gallardo en contra de tapar el escudo para albergar la final de la Libertadores.

Por último, se dice que en economía hay dos máximas, que los recursos son escasos y las personas reaccionan a incentivos. River pasó de aprobar en la Asamblea un presupuesto de 40 millones de dólares para la renovación del estadio a gastar 200 millones sin control hasta fracasar en el lanzamiento de un estacionamiento sin demanda. El fútbol terminó financiando las obras que prometieron ser autosustentables. El "estadiocentrismo" se pasó varias paradas y se chocó con la realidad. River no es una constructora, es un club de fútbol. Cuando los resultados no se dan, el hincha dice basta.

Se cierra el ciclo de un presidente cuyo legado tiene dos caras opuestas. En términos de infraestructura, Brito es, sin dudas, uno de los presidentes más importantes de la historia del club. Sin embargo, la debacle futbolística ensombrece su gestión, algo que no sería tan grave si no hubiese sido en el mejor momento económico de su historia y con el clásico rival afuera de la Libertadores durante medio mandato. Simplemente, imperdonable.

Y deja para su sucesor el "Riesgo Cemento": Sin una oposición a la altura, el oficialismo puede autofagocitarse 12 años de éxitos y crecimiento en 4 por insistir en obras que ya nadie pide por aclamación y descuidar el fútbol que todos reclaman, donde deja latente un estallido cuyo detonante depende de que la caprichosa no se encariñe con el rival de toda la vida.

Ya le pasó a Aguilar.

lunes, 6 de enero de 2025

Elecciones 2025 en River Plate: Un oficialismo sin candidato?

Patanian en campaña 2013
Passarella transitaba su último año y en River había una incógnita. Dónde estaba Rodolfo D’Onofrio, el contrincante al que derrotó por seis votos. Allegados contaban que no aparecía en Núñez porque estaba muy golpeado por cómo había perdido. Él confesaría más tarde que sabía que su presencia desestabilizaría aún más al club. Patanian y Ballotta, sus más cercanos dirigentes por entonces, con su propia plataforma electoral lista, aguardaban un guiño. Brito, un desconocido en ese momento, hacía sus primeros pasos en el club. El guiño llegó. 

Un domingo Rodolfo D’Onofrio apareció en la San Martín Baja junto a Francescoli. La historia cuenta que Patanian y Ballotta lo empujaban a lanzarse. Querían asegurar la presidencia sino ellos lanzaban formalmente su candidatura y D’Onofrio se decidió.

Jorge Brito en campaña 2013
En esas fechas llegaría a su punto de cocción la gran alianza que gobierna River desde aquél 15 de diciembre en donde recibieron un club sin la presencia del presidente y con una deuda inexplicable. 

Esa alianza electoral tenía algunos principios. Rodolfo D’Onofrio sería el candidato a Presidente porque aseguraba la elección. Jorge Brito sería el Vicepresidente Primero porque sería quien se encargaría del financiamiento de la campaña. Y, finalmente, Matías Patanian sería el Vicepresidente Segundo porque fue quien, siendo el mejor posicionado, le cedió su lugar a D’Onofrio, cuando este se lanzó. 

Y la alianza se sellaba con un pacto: el poder sería rotativo. En el orden de la lista, sería la rotación de presidentes en sucesivos mandatos. D’Onofrio 2013, Brito 2017, Patanian 2021.

Un Gallardo campeón de la Sudamericana, Libertadores, Suruga y dos Recopas no estaba en los planes de la alianza. El sweater rojo pedía reelección y la tuvo, a pesar de la bronca de Jorge Brito quien debería esperar un mandato más. El pacto se reseteó.

El cambio escondía un asterisco. Por estatuto, Patanian no podría volver a ser Vicepresidente. D’Onofrio cubrió el lugar con Cascio, un dirigente muy ponderado en el mundo River, que no alteraba los términos de la alianza inicial. Pero su fallecimiento, generó uno de esos imponderables de la política. 

Stefano di Carlo asume como Vicepresidente
En Octubre de 2018, D’Onofrio elegiría como Vicepresidente Segundo a Stefano di Carlo. El joven dirigente se había hecho un lugar importante en la ponderación del presidente más exitoso de la historia de River no sólo por entregar siempre resultados sino porque lo acercó a la política nacional, la aspiración del presidente quien por entonces declaraba "es probable que me dedique a la política cuando termine la presidencia de River".

D’Onofrio cumpliría su -segunda- palabra y en las elecciones 2021 sería el turno del banquero Brito con Patanian como Vicepresidente Primero e Ignacio Villarroel, como Vice Segundo. 

El primero ya había cumplido un mandato fuera del poder lo cual le permitiría, según el Estatuto vigente por entonces, volver a ser Vicepresidente y luego candidato a Presidente. 

El segundo, Villarroel, el cerebro para evitar que la Conmebol le quite la localía a River luego de los incidentes fuera del perímetro de seguridad en la final de la Libertadores 2018. No sólo por los resultados logrados producto de su gestión, sino lo valiente de enfrentarse a su propio sector político -el PRO-, que por entonces gobernaba el país.

Stefano di Carlo ingresó a la lista como Secretario, el cargo más relevante en el club luego del Presidente y el DT. Es el arquitecto detrás de todas las decisiones del presidente y su natural confidente. Una vez más, Stefano no sólo se ganaría la confianza del primer mandatario sino que, esta vez, comenzaría a tomar vuelo propio, máxime cuando comenzaron las obras del Monumental.

Brito recorriendo las obras con Chiqui Tapia
Al asumir, Brito comprendió rápidamente la coyuntura económica nacional y los incentivos políticos en el club. Así como su padre construyó una torre magnífica para el Banco ante una coyuntura similar, Jorge Pablo haría la misma lectura en el club. La sombra de los logros deportivos de Rodolfo lo obligaron a ir por más. El antecedente del cambio de césped selló su decisión. Cepo, dólar alto y mano de obra barata combinado con un empeño personal en acercar inversiones en marketing fueron el combo perfecto para remodelar el estadio. Brito había elegido su legado y Stefano había encontrado su plataforma política mientras Patanian apostaba todo al fútbol.

Dos eliminaciones en octavos y una frustrada final en el Monumental sumado al impacto local e internacional de la remodelación del Monumental puso en duda el resultado de la ecuación electoral oficialista. 

Comienza este 2025 electoral en River con una novedad política impensada. Por primera vez desde su llegada al poder, en el oficialismo no hay certezas sobre su sucesor. 

O será que ya no existen dudas? 

jueves, 3 de agosto de 2023

El River de Brito y un campeonato economico por afano

Brito y Ballotta cuando iniciaron la reconstrucción económica de River Plate

Exclusivo Política en River

La reunión de Comisión Directiva de River de esta tarde fue histórica. Luego de ingresar a River como Vicepresidente de Rodolfo D’Onofrio y ser el motor del cambio económico del club, Jorge Brito presentó un superávit operativo histórico, porque representa un cambio de paradigma en un club que superó una pandemia y encadenará tres ejercicios que serán un antes y un después en el club.

Qué significa y por qué es tan importante un superávit operativo tres años seguidos? Esto es exactamente lo opuesto a los resultados económicos de la gestión Aguilar o Passarella. Ellos llegaban al cierre de balance tan comprometidos por el déficit operativo y de fútbol que tenían que malvender juveniles en paquete o por pintura con tal de que el cierre de positivo en los números. Números completamente ficticios que llevaron al club a lo más nefasto de su historia.

Para ponerlo en números, el resultado operativo que cierra en agosto arrojará un superávit de 5.000 millones de pesos, antes de vender jugadores. Leyeron bien, cinco mil millones y después vienen los ingresos por venta de jugadores.

Pero esto no es todo. Otro de los hitos importantes que presentó Brito es que el balance que cierra y el presupuesto que está presentando se hace con una apertura inédita de gastos. Antes se hacía un desglose por áreas, lo cual generaba una verdadera telaraña de números inentendibles. Una parte de los gastos por Presidencia, otra por Secretaría, otra por Fútbol Profesional, aparte el Fútbol Amateur y así seguía casi infinitamente para ocultar gastos de un área en otra gracias a una poco simpática “creatividad contable”.

La gestión de Andrés Ballotta, el Tesorero y dupla desde hace años en la gestión económica del Presidente, agrupó los conceptos en rubros con los cuales controla la gestión del dinero en River: Fútbol (profesional y formativo), Deportes y societario (el club), Educación (el instituto) y Administración.

Esto no sólo es relevante por el seguimiento y control del gasto para ser un club sano en sus finanzas sino también para la transparencia. Una gestión que es auditada por una consultora internacional como Grant Thornton. Así, cualquiera que vea los números no cae en una maraña inentendible que normalmente oculta déficits.

Si volvemos a los números, los ingresos ordinarios que incluyen la cuota social, abonos, venta de entradas e ingresos comerciales generados por marketing no solo rompieron records sino que son el motor detrás de este hito en la historia del club.

Obviamente, quedará para otro momento la discusión sobre si el club, en una situación de superávit no está castigando en demasía a los socios a través de la actualización mensual de la cuota y los abonos. Si hay que empezar a bajar el gasto administrativo dado que se paga lo mismo en empleados que en plantel profesional. O si tiene sentido que los socios que no utilizan el club subsidien a los dos mil socios que lo utilizan y pagan la mitad de lo que se invierte en ellos, muchos de los cuales viven en uno de los barrios más caros del país.

Pero volvamos al balance, para que se entienda bien, el superávit operativo es lo que hizo posible inversiones del tamaño y magnitud de los 100 millones para el cambio de césped, los 52 millones de dólares la reforma del estadio, la proyección de construcción de un instituto nuevo por 8 millones de dólares y el nuevo centro de alto rendimiento para la formación de juveniles a pocas cuadras del Monumental por otros tantos mientras se invirtieron 35 millones de dólares en el plantel profesional con jugadores de la talla de Nacho Fernández, Enzo Díaz, Barco, Borja, Rondón, Funes Mori, Colidio y Lanzini.

Y eso no es todo, gracias a que el superávit operativo llegó para quedarse, el presupuesto 2023-2024 que presentó Ballotta estima que River tendrá un superávit operativo de casi 9.000 millones. Si, esto es luego de realizar las inversiones para terminar todos los proyectos y dejar a River con la infraestructura de una potencia del fútbol mundial y un plantel competitivo.

Alguna vez Passarella dijo que él quería ganar el campeonato económico. Hoy Brito puede decir que lo ganó como Demichelis, tres fechas antes y por robo.

Económicamente, en Argentina, River es demoledor.

martes, 4 de julio de 2023

Brito, balance del primer semestre de gestión (2023)

Brito Patanian D'Onofrio y Vila en la Vendimia 2023
La alianza gobernante en River junto a Vila en la Vendimia 2023

Termina el primer semestre del año y es momento de hacer un balance de estos primeros seis meses de un nuevo River, el River sin Gallardo, el verdadero inicio de la presidencia de Brito, una presidencia que transita dos realidades paralelas, dos líneas que parecen tocarse sólo ante los episodios de crisis.

Como presidente Jorge Brito nació como un "lame duck" o "pato rengo". Es un término que se utiliza en la política de Estados Unidos para los presidentes que inician su gestión sabiendo que no tienen otro mandato. 

Las implicancias de tener un pato rengo en la presidencia son varias pero fundamentalmente es que el protagonista no puede ejercer su liderazgo en toda su dimensión porque el resto de los actores políticos saben que no solo su poder tiene fecha de vencimiento sino que la fortaleza del mismo es inversamente proporcional al paso del tiempo, salvo un suceso excepcional. Esto provoca que en el mismo momento de su asunción, el resto de los dirigentes empiezan a mirarse entre ellos de cara a la sucesión por lo que impacta directamente en la gestión. El tamaño de este impacto depende de la espalda política de los protagonistas y de lo voraz de la interna. La buena noticia es que, por el momento, el pato camina sin sobresaltos.

En cuanto a poder, hasta el momento no tuvo tanto impacto. Esto se debe a que la alianza política que gobierna tiene hoy al mando al dirigente más poderoso de la tríada. Jorge Brito es, sin dudas, uno de los presidentes con más poder en la historia del club y el mismo precede su llegada al club. Además, detenta una personalidad fuerte, es hiperactivo y delega pero exige resultados. En management, es un típico estereotipo de dueño. Sabe que el poder no se delega, se ejerce y que lo que se delega se sigue de cerca; y que existen otras cuestiones que no son de su interés porque, directamente, no son importantes en su esquema de poder. 

Respecto a la interna, esta crece día a día y comienza a friccionar pero no entorpece la gestión. Patanian, candidato natural a sucederlo por ser parte de la tríada inicial, es fútbol en estado puro y Brito delegó en él junto a Francescoli, la elección del sucesor de Gallardo. Ahí aparece el primer punto fuerte de estos seis meses de 2023. "Sin dudas lo mejor del semestre fue la elección del DT y la manera natural con la que se dio la sucesión de Gallardo, algo que no se menciona en ningún lugar", nos dijo en off the record, un alto dirigente del club. 

Párrafo aparte para el equipo, una verdadera sorpresa, para bien y para mal. Sorpresa por cómo Demichelis hace jugar al equipo. Un equipo que no perdió la voracidad en la presión alta y en el ataque. Pero al mismo tiempo es una verdadera sorpresa y decepción la forma en que un marcador central como DT hace defender al equipo. Es verdad que la defensa es heredada pero desconciertan los planteos en el fondo en partidos clave como los de River de visitante en la Copa Libertadores. El balance de estos seis meses es muy auspicioso. Triunfo en el clásico, primero en el torneo y en octavos de la Copa. En Julio se juega todo.

Volviendo a la política, la tercera pata de la alianza política, Rodolfo D'Onofrio, dejó el club y colocó a su hija en Comisión Directiva, sin mayor protagonismo. De vez en cuando, circula en el club su disconformismo con algunas situaciones y la supuesta voluntad de volver a ser presidente que, dicho sea de paso, anularía toda expectativa de rotación. Sólo un contrato con el Club bloquearía toda aspiración política.

La sorpresa de estos meses es la aspiración a presidente de Stefano Di Carlo, el Secretario del Club, que estaría buscando quebrar la rotación D'Onofrio-Brito-Patanian. Poco conocido entre los hinchas, su principal fortaleza es la política del club. Logró en Brito lo mismo que había logrado con su padrino D'Onofrio, acumular poder de gestión para la rosca, algo en lo que Patanian no muestra interés. Es el armador que logró que prácticamente desaparezca la oposición en Comisión Directiva, incorporando varios miembros de la minoría a la bancada oficialista.

Esta interna que mencionamos es "muy sana", como le afirmó un Directivo a este sitio. "Cuando tienen dudas de las intenciones detrás de las decisiones del otro, se consultan directamente. Comparten eventos como el asado del cumpleaños del presidente", fueron dos de los ejemplos que dió. 

Este tipo de interna habilita importantes avances, como la histórica incorporación de más de 7 hectáreas a sólo un kilómetro del Monumental para la creación de un centro de alto rendimiento para las divisiones formativas. Inicialmente, era el predio donde se iba a mudar el Monumental pero la mudanza quedó trunca. En ese momento, Stefano continuó la gestión con el organismo nacional (AABE). Lo destacable es que la concretó antes que haya un cambio de gobierno. Por qué es importante? Porque si llega al poder el macrismo, probablemente dicha gestión hubiese quedado en la nada.

Este convenio es probablemente el hito institucional más importante de River en las últimas décadas. Lo destacaron todas las fuentes consultadas para esta nota, tanto oficialistas como no oficialistas.

Otro gran acontecimiento de estos seis meses fueron las inauguraciones de la obra del Monumental, un proyecto que está madurando sin pausa. A pesar de algunos temas conceptuales como el color o aspectos que deberían ser solucionables, la obra es impactante, histórica y espectacular. Es uno de los temas que, como explicábamos antes, Brito delegó en Taratuty pero sigue de cerca y realiza todo tipo de gestiones para que no se demore. La razón es simple, la obra recauda. 

Si de balances se trata, también hay que mirar los puntos flojos de estos seis meses, comenzando por el atropello constante a los socios motivados por dos cuestiones de fondo. En primer lugar, la necesidad de generar fondos para continuar siendo un club superavitario, algo en lo que ya nadie discute en el club, pero que en palabras de un dirigente muestra "la poca sensibilidad que tenemos con el bolsillo del socio en un momento de crisis económica". Y, en segundo lugar, las reformas del estadio.

La voracidad recaudatoria hace que los socios se sientan cada día menos socios y más clientes de un club que le exige más de lo que le entrega. Nadie discute que no se puede ir a cualquier tribuna gratis pero tampoco que "la forma de recaudar es cobrar dos veces", como confesó un importante dirigente oficialista, en clara crítica a estos atropellos al socio.

Cómo es eso? Proliferan las causales de derecho de admisión, las cuales provocan dos "externalidades positivas" para el club: el club te sanciona, vende el lugar mientras dure la sanción y el socio pierde pioridad para renovar su lugar el próximo torneo. "Estrategias para vender todo el estadio siempre", se le escapó a un dirigente. Pero esas causales de derecho de admisión no se aplican a los socios que cuelgan las banderas oficialistas que infringen la norma del 2x1. Cumplan lo que yo exijo pero no juzguen lo que yo hago.

Esos mismos socios son los que padecen otro gran punto flojo de estos seis meses. La masiva convocatoria que genera el equipo se choca con total la improvisación en varios aspectos de la impactante obra del Monumental. El estadio recibe 18.301 hinchas más que el año pasado con los mismos ingresos, los mismos baños y tan sólo dos salidas nuevas bastante angostas en las populares. 

Recordemos que este semestre se inició con el partido versus Argentinos Juniors donde había hinchas descompensados tirados por las escaleras y tuvo episodios con puertas cerradas que dejaron a los hinchas a un paso de la tragedia.

Por último, no hay que olvidar la polémica alrededor del cambio de ubicación del Instituto, movimiento que se había prometido llevar al Tiro Federal en el video institucional de la obra del Monumental. Los socios plenos que utilizan la pileta se opusieron durante el verano, no se movió nada en el club y siguen existiendo tres lotes en el Tiro Federal sin oferentes

Los Dirigentes del club están tocando un cable de alta tensión cuando se meten con el bolsillo y las tribunas, donde hay mujeres, niños y adultos mayores.

Este cable de alta tensión está generando chispazos como se vio cuando Brito subió al escenario en la inauguración de la estatua de Gallardo. Creyentes de que solo son opositores, muchos de los que silbaron, no ocultan su descontento en las tribunas mientras esperan iniciar el partido. "Los Dirigentes van gratis a la cancha y me toman lista para renovar el abono?", "Tengo amigos con décadas siguiendo a River por todos lados que se quedaron afuera del estadio porque se enfermaron o se les murió un familiar", "Brito hace 20 años ni siquiera era socio de River", son comentarios que se escuchan en la popular y en las plateas pero que se ningunean en el primer piso.

El balance del primer semestre de gestión es positivo. El equipo se juega todo en julio con un torneo al alcance de la mano mientras sueña con la Copa pero con grandes preocupaciones por la defensa.

Mientras tanto, los dirigentes juegan a tocar el cable de alta tensión y es un juego que puede costar caro en las urnas.

martes, 27 de diciembre de 2022

Nervios en el primer piso

Hace poco más de un año asumía Brito la presidencia de River Plate. Lejos de un año de triunfos y acumulación de gloria, la gestión de Brito cosechó golpes deportivos y al bolsillo. 


El nuevo presidente de River subestimó a Vélez eligiendo traer a Suárez luego de octavos y quedó afuera, perdió todos los clásicos desde que asumió mientras enfrente se coronaban campeón y, como si fuese poco, se quedó sin el escudo protector de Gallardo.

Gallardo tenía la centralidad política del club. Tal es así, que al realizarse la despedida del Muñeco, el único sinsabor de la noche fue cuando mencionó "al presidente", provocando una silbatina que dejó desorientados a los dirigentes que confían en las encuestas que circulan por el club. 

Mientras el oficialismo tilda a los detractores como "una minoría intensa de Twitter", hace meses entraron en un pozo oscuro de popularidad que parece acentuarse. En más de 3.100 encuestados un 39,5% dijo que su gestión es "mala" y, aún peor, más del 15% dijo que es "desastrosa". Los descontentos superan a los satisfechos al año de gestión, incluso luego de un rally de votos a favor a horas del cierre de la encuesta.

Los que tomaron rápidamente nota de esto fueron los accionistas del oficialismo. Con D'Onofrio lanzado a la política, un presidente que no hace pie y no tiene reelección, adelantaron la interna de la sucesión. Tal es así, que los aspirantes a la presidencia ya tienen una "mesa política" y comenzaron lentamente a tejer alianzas. Temen quedar mal parados ante una sorpresa.

Brito y Tinelli en la final del Mundial

Brito y Tinelli luego de la Final del Mundial

Luego de un Mundial de respiro donde Brito se dejó fotografiar al lado de Tinelli mientras Tapia levantaba la Copa, Demichelis comenzó su ciclo con un refuerzo lesionado, con una gran incorporación como Nacho Fernández pero con la incógnita de Juanfer Quintero, el jugador que una inmensa mayoría le reclama al Presidente.

Mientras eso pasaba, los hinchas juntaban bronca por los aumentos mensuales de cuota a la espera de una renovación de Tu Lugar Monumental que se demora en llegar y que traerá mucha tela para cortar ya que hay cambios forzados de ubicaciones. Será verdad que las agrupaciones de la vieja popular ya tienen asegurado su lugar en la nueva popular?

Ante este panorama, la desesperación es tan grande en el primer piso que hoy se reúne la agrupación del presidente, convite en el que aseguran su presencia. Si, un 27 de diciembre, de apuro. 

Los nervios se notan. 

 
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