En un partido electrizante perdimos el invicto. ¿Será esto algo preocupante? No lo creo. River jugó como lo viene haciendo, ni mal ni bien, como siempre. Un planteo seco, duro, con mucha presión por la mitad de la cancha. Enfrente tuvo un rival que se agrandó en las malas y supo darlo vuelta.
En el segundo River no tuvo respuesta. No bastó la entrada del Burrito para desequilibrar ni la baja en el equipo Canalla. Pudimos empatarlo en los pies de Villagra, que vaya a saber porqué sacó un tiro tan desviado. No queremos pensar que haya sido por sus inicios en Central, pero más de uno, a decir verdad, lo piensa o lo pensó en el momento. La historia y las entrevistas nos contarán lo que realmente pasó por su cabeza en ese instante. Hoy no queremos caer con toda la responsabilidad sobre un jugador que está levantando su nivel.
Pero volviendo al título. River en sus 32 gritos de campeón sólo una vez fue invicto lo que arroja un poco de luz sobre lo que sucedió esta tarde en Arrollito. Perdimos a mitad de campeonato y eso habla muy bien del equipo. Perdimos en el momento "justo" para llamarlo de alguna forma. Justo para recuperarnos en el Monumental e ir a ese barrio con olor del sur de la Capital con las fuerzas necesarias para lograr el único resultado que buscamos: ganar.
A no desesperarse. A trabajar mucho en la semana. No hay partido por la Copa asique tranquilos que River recibió un golpe pero lejos está del Knockout.
domingo, 20 de abril de 2008
Tropezón no es caída
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